España sale de la lista de los diez mayores fabricantes de automóviles del mundo
Tailandia, Canadá y Rusia pasan por delante en el 'ranking' de producción de 2012
Las plantas españolas se mantienen en el puesto 'número dos' de la Unión Europea
El sector pide más medidas para garantizar la competitividad de las 17 plantas
Cristina Galindo Madrid7 MAR 2013 - 13:05 CET
La industria española del automóvil se ha caído de la lista integrada por los diez mayores fabricantes del mundo. Tailandia, Canadá y Rusia han adelantado a España en este ranking, según los datos correspondientes a 2012 publicados este jueves. Con menos de dos millones de coches producidos por primera vez desde 2000, el sector español consigue mantenerse, por la mínima, en el segundo puesto de la UE. La patronal del sector, Anfac, advierte de que, pese a que se han incrementado las inversiones en los últimos meses, hay que tomar medidas para garantizar la competitividad de las 17 plantas españolas.
La producción cayó un 16,6% el año pasado, hasta las 1.979.103 unidades, nivel similar al de Francia, que se coloca por detrás de España en la lista europea por muy poco. El principal fabricante de la UE sigue siendo, con diferencia, Alemania, con más de cinco millones de coches. En el mundo, la fabricación superó los 84 millones de vehículos, un 5,3% más que en 2011. China es el primer productor, seguido de Estados Unidos, Japón, Alemania y Corea del Sur. La segunda mitad del top 10 la integran India, Brasil, México, Tailandia y Canadá. España queda relegada al puesto 12º, por detrás de Rusia, y por delante de Francia, Reino Unido y República Checa.
La crisis económica en Europa, donde se encuentran los principales mercados de la industria del automóvil instalada en España, está pasando factura al sector. En 2012, solo se vendieron 699.589 turismos, un 13,4% menos que el año anterior y una cifra muy similar a los 689.076 coches que salieron de los concesionarios españoles en 1986. Aunque más del 80% de lo que se produce en España se exporta, el descenso de las ventas en territorio nacional afecta también a la producción. "La lucha mundial por atraer inversiones productivas e industriales es constante", advierte Anfac en un comunicado. "A pesar de las nuevas inversiones anunciadas recientemente, no podemos caer en la autocomplacencia; el futuro no está asegurado", añade.
El año pasado las multinacionales del automóvil invirtieron en España entre 1.500 y 2.000 millones de euros. La última en anunciar una inversión, de 130 millones, fue la japonesa Nissan, que hace unas semanas confirmó que fabricará a partir de 2014 un nuevo turismo en España. Muchas de estas inversiones se han logrado gracias a la flexibilidad laboral que caracteriza el sector, además de que en los últimos meses ha habido en España una bajada de los costes laborales. "Es necesario tanto converger en competitividad, como la necesidad imperiosa de atraer capital productivo para volver a crecer de forma sostenida", indica Mario Armero, vicepresidente ejecutivo de Anfac.
La patronal presentó en noviembre pasado un ambicioso plan para elevar la producción de coches hasta los tres millones al año. Se trata de un paquete de cien propuestas con ayudas a la compra, mejoras logísticas y la eliminación del impuesto de matriculación para incrementar la productividad y dar un impulso al negocio. Estas medidas, que requieren una inversión pública cercana a los 500 millones de euros y, que de ponerse en marcha, empezarían a dar frutos en 2015, harían crecer el producto interior bruto (PIB) un punto porcentual y crearían 73.000 empleos, según sus cálculos.
De momento, la medida tomada por el Gobierno más visible han sido los planes PIVE, que contemplan ayudas para la compra de coche, y otro plan para renovar vehículos comerciales.
‘Top 15 mundial’
- China
- Estados Unidos
- Japón
- Alemania
- Corea del Sur
- India
- Brasil
- México
- Tailandia
- Canadá
- Rusia
- España
- Francia
- Reino Unido
- República Checa
La crisis económica en Europa, donde se encuentran los principales mercados de la industria del automóvil instalada en España, está pasando factura al sector. En 2012, solo se vendieron 699.589 turismos, un 13,4% menos que el año anterior y una cifra muy similar a los 689.076 coches que salieron de los concesionarios españoles en 1986. Aunque más del 80% de lo que se produce en España se exporta, el descenso de las ventas en territorio nacional afecta también a la producción. "La lucha mundial por atraer inversiones productivas e industriales es constante", advierte Anfac en un comunicado. "A pesar de las nuevas inversiones anunciadas recientemente, no podemos caer en la autocomplacencia; el futuro no está asegurado", añade.
El año pasado las multinacionales del automóvil invirtieron en España entre 1.500 y 2.000 millones de euros. La última en anunciar una inversión, de 130 millones, fue la japonesa Nissan, que hace unas semanas confirmó que fabricará a partir de 2014 un nuevo turismo en España. Muchas de estas inversiones se han logrado gracias a la flexibilidad laboral que caracteriza el sector, además de que en los últimos meses ha habido en España una bajada de los costes laborales. "Es necesario tanto converger en competitividad, como la necesidad imperiosa de atraer capital productivo para volver a crecer de forma sostenida", indica Mario Armero, vicepresidente ejecutivo de Anfac.
La patronal presentó en noviembre pasado un ambicioso plan para elevar la producción de coches hasta los tres millones al año. Se trata de un paquete de cien propuestas con ayudas a la compra, mejoras logísticas y la eliminación del impuesto de matriculación para incrementar la productividad y dar un impulso al negocio. Estas medidas, que requieren una inversión pública cercana a los 500 millones de euros y, que de ponerse en marcha, empezarían a dar frutos en 2015, harían crecer el producto interior bruto (PIB) un punto porcentual y crearían 73.000 empleos, según sus cálculos.
De momento, la medida tomada por el Gobierno más visible han sido los planes PIVE, que contemplan ayudas para la compra de coche, y otro plan para renovar vehículos comerciales.